La recomendación es regar en horario nocturno para evitar la evaporación del agua
La Dirección de Parques y Jardines da a conocer una serie de recomendaciones a los ciudadanos para la plantación y riego de las distintas especies de plantas, entre ellas los árboles, con el fin de que éstas puedan desarrollarse bien y al mismo tiempo no se desperdicie agua.
El titular de la dependencia, Daniel Zamarrón Saldaña, dijo que en lo referente a la plantación, la gente debe tener conciencia de que plantar un árbol no es solamente hacer hueco y ponerlo, ya que se requiere hacer una preparación del espacio donde va a colocarse la planta.
Primero que nada, indicó, es verificar que exista el acceso al agua, porque si la gente tiene que andar acarreando botes para regar los árboles, pues lo más seguro es que no se rieguen y que termine el árbol seco.
El segundo paso, explicó, es verificar la condición del suelo donde se plantará el árbol, ya que hay superficies arenosas, artillosas, de caliche o vegetales; al determinar de qué tipo es, se debe hacer una preparación iniciando con la excavación, posteriormente se humidifica el subsuelo para que lo plantado encuentre humedad y las raíces se extiendan hacía abajo.
Si no se hace adecuadamente esta preparación, la raíz se presenta de manera superficial, provocando problemas como el levantamiento de banquetas o la vulnerabilidad de que los árboles puedan colapsarse ante los fuertes vientos, dijo Zamarrón.
Dijo que el espacio en donde se hará la plantación debe inundarse de agua para humedecerlo, maniobra que debe hacerse al menos 6 veces en un lapso de dos semanas y verificar que el subsuelo tenga permeabilidad para evitar el ahogamiento de la planta; una vez hecho este proceso se introduce tierra vegetal con material de compostado que contiene nutrientes, lo que le da una base efectiva del crecimiento al árbol.
Al plantar se sella con una cama de “mulch”, un acolchado que ayuda a mantener la humedad al momento de regar.
Zamarrón explicó que el tema de riego en temporada de verano, lo recomendado es hacerlo de noche, pues si se riega en el día la probabilidad es que el agua se evapore y existan complicaciones para el desarrollo de la planta.
Señaló que para los árboles recién plantados y pequeños las primeras semanas el riego debe ser diario.
En los primeros tres años de crecimiento del árbol, el ciclo de riego debe de ser un día sí y un día no y una vez pasando este periodo, deberá recibir agua cada tres días.
El titular pide a la ciudadanía tener conciencia con el cuidado de los árboles, desde la plantación hasta el desarrollo de la planta, pues la vegetación requiere de atención adecuada para su correcto crecimiento.
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